Milhouse está intentando llamar a su mejor amigo con tal de que venga a la casa a jugar un rato, pero Bart está demsiado ocupado cogiéndose a Marge como para querer ir a perder el tiempo jugando como un mocoso, lo que obliga a Milhouse a deambular por su casa, descubriendo a su mamá en paños menores, y también desesperada por una polla dispuesta a darle placer, incluso si es la de su propio hijo, de pronto, Milhouse ya no es más el chico patético que todos creen que es en: Los Simpsons Viejas Costumbres 6 sexis pelua