En una celda Felicia Hardy piensa en Spider-Man y se toca su coño, quiere venganza por haberla encerrado allí y por eso se lo imagina atado a la pared con unos grilletes mientras le come la polla. Esto ha hecho que se vuelva muy caliente, masturbándose aun cuando sabe que hay cámaras que la están espiando. Una mujer que tiene el poder de abrir su celda para que entren varios hombres, que con las máscaras de los superhéroes de Marvel comienzan a tener sexo con ella. Todo para disfrutar de un gran espectáculo que le permita tocarse bien rico mientras a Black Cat le hacen un gangbang.